V
iví una de las mejores experiencias de mi vida... Estar en el Sahara,
acampar llena de arena color ocre, naranja, color indescriptible...
estar con los nativos de ahí, los bereberes,
tocar los tambores con ellos,
sorprenderme por tener buen ritmo a pesar de que era la primera vez que lo hacía,
bailar con sus cánticos,
cantar cielito lindo con mi querida argentina que se llama Morelia,
disfrutar planes con ella y Nadia,
fumar,
beber una cerveza al tiempo que para ellos estaba helada,
disfrutar el cielo completamente lleno de estrellas,
ver la luna,
desorientarme en 20 metros entre las dunas a las 2am
y ver como estos hombres sabían perfecto el camino,
pasar frío justo al amanecer,
dormir al intemperie con cobijas de lana,
ver como salía el sol,
montar dromedarios hermosos y tiernos,
subir una duna de 50 metros unas 3 veces,
recorrer las montañas e inmensidades de África por 20 horas...
Gracias vida, gracias!
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